viernes, 20 de mayo de 2011

QUE HABLE EL PUEBLO

QUE HABLE EL PUEBLO
     Oficialmente, con el mitin celebrado ayer jueves, nosotros, la candidatura UNIDOS POR ALLO-UPA, damos por cerrada la campaña electoral. Han sido unos días de ilusión, de trabajo en equipo, de aprender bastantes cosas, de conocer un poco más a compañeros de candidatura francamente encomiables, etc. Sobre todo han sido unas semanas donde hemos sufrido en nuestras propias carnes el ser una candidatura de gente independiente. Pero somos así y así queremos ser. Hemos palpado y soportado una realidad tozuda que te pone de manifiesto día tras día cómo los entes públicos que tienen algo que ver en el proceso electoral, te proporcionan todo menos facilidades. Demasiadas idas y venidas porque no saben o no quieren informarte bien a la primera. Uno no quiere pensar que sean incompetentes pero en algunos casos no saben simularlo. Pero también de este modo de proceder hemos aprendido. Hemos aprendido a no fiarnos nunca de lo que nos decían a la primera. Nos hemos habituado a preguntar lo mismo dos o más veces en dos lugares distintos. Damos fe de que así medio funciona el tema.
     Hemos realizado una campaña donde ha primado la información, el dar a conocer nuestros proyectos. Lo hemos hecho así pues entendemos que es esto lo que hay que hacer en democracia si uno cree en ella. Su negación, real o hipócritamente fingida, es un irresponsable intento de aprovechamiento político partidista. Nosotros te decimos qué vamos a hacer, cuales son nuestros proyectos, cómo lo vamos a hacer y tu, pueblo, decides si nos das tu confianza, si nos dices: “adelante, tienes mi apoyo, tienes mi voto”.
     Ayer, como digo al principio, cerramos la campaña con un acto electoral de información con presencia de un buen puñado de vecinos. Yo me siento orgulloso por muchas cosas pero sobre todo por cómo actuaron, como se comportaron los compañeros jóvenes de la candidatura. Tiene mucho mérito, que personas sin apenas experiencia en hablar en público, se tiren al ruedo preñados de ganas e ilusión y lo hagan tan estupendamente. ¡Enhorabuena, chavales¡. Ahora que no os fiche ninguna otra candidatura como cabeza de cartel, no me fastidiéis. Además lo hicieron sin importarles un bledo que estuviesen presentes miembros de otras candidaturas incluso con grabadora en mano. ¿Qué poco estilo, no? A los de la grabadora, me refiero. Uno siempre ha creído que hay una ética equivalente a moral, rectitud en el hacer de uno, honestidad, etc. Pero hay otra ética que yo suelo decir social que es un saber comportarse ante la sociedad, ante un grupo de personas y que tiene mucho que ver con la forma de ser diaria de las personas. Me siento orgulloso cuando alguien no proclive a hacer autocrítica aparece con una grabadora en una exposición mía. El uso que se le dé luego a la grabación me sale por una friolera, es decir, me da igual. En este caso me consta que inmediatamente se reunieron con sus asesores, aunque me da la gana pensar que la grabación la escucharían en la intimidad al tiempo de acostarse. Y yo me pregunto, es que a estas alturas de la película no tienen todavía ideas suficientes para lanzar una candidatura, para montar un mitin electoral? ¡ Qué ocasión desperdiciaron de ponernos a prueba ¡¡. Yo en su lugar me hubiese puesto en pie y dirigiéndome  a la mesa hubiese dicho: Buenas tardes señores; tengo interés en grabar su exposición. ¿Hay algún inconveniente? Y uno, que tiene desde hace tiempo la cabeza sin pelo y está más que acostumbrado a que le graven, a que le filmen le hubiese contestado: perfecto. Eso sí, hubiese aprovechado que esto es democracia, como democracia y apertura de miras es hacer llegar tu publicidad a todos vecinos sin excepción, no solamente a los de tu cuerda, para recordarle su no dar facilidades para grabar según pude ver en uno de los pocos plenos a los que asistí al principio de la legislatura. Nosotros actuamos así porque no tenemos nada que ocultar, no tenemos miedo a la democracia. Ahora, como siempre, sencillamente toca democracia, toca participación. Es hora de que el pueblo hable en las urnas y lo demás nos importa bastante menos, por no decir nada.
José Luis Ochoa