RESCATADOS, SUBYUGADOS Y EN EL CUARTO OBSCURO
Si, amable seguidor, ya sé que tal vez lo que tocaba hoy era referirse a las elecciones griegas. Pero por una parte todos los medios de comunicación ya llevan unas cuantas horas martilleándonos con los resultados. De todos modos, y dicho sea de paso, uno echa en falta un análisis de datos, participación, etc. hecho más desde el punto de vista democrático. Por otro lado uno sospecha que todavía nos quedan unas cuantas horas en las que oiremos por activa y por pasiva lo bueno e importante que ha sido para todos nosotros los resultados de esas elecciones griegas por haberlas ganado Nueva Democracia con el 30% de los votos emitidos. Como si con los resultados de las elecciones griegas se nos hubiesen solucionado todos los problemas que nos aquejan en este momento.
Dejemos pues de momento los resultados y el análisis de las elecciones griegas, si se tercia para más adelante, y hoy simplemente quería anotar algunos conceptos que a mí me parecen importantes de manifestar pues, como suelo decir con alguna frecuencia, aquí y ahora lo grave no es la crisis en sí, ni el déficit, ni la deuda, ni la prima de riesgo, etc. Aquí lo grave es cómo estamos encarando todas esas milongas cuyas definitorias palabras ya todo el mundo manejamos, aunque no sé si entendemos demasiado bien. Aquí lo grave es que están sustentando el peso de la crisis y el desmadre subsiguiente y añadido en los mismos de siempre fundamentalmente dejando jirones de nuestra incipiente democracia, de nuestras libertades, de nuestra capacidad de decisión, al tiempo que nos echamos en brazos no precisamente de una madre bondadosa y totalmente de fiar sino más bien en brazos de quien apenas nos tenga abrazados no tendrá ningún reparo en apretarnos el gaznate hasta asfixiarnos con tal de que le paguemos hasta el último euro que le adeudemos. “Grecia espejo roto” escribí en una ocasión hace algunas semanas.
Claro y todo esto con el aderezo añadido del engaño, del digo pero no digo, del hoy afirmo esto y mañana incluso lo contrario. Aquí nunca pasa nada. Claro, hasta que pase. En fin como si nos estuvieran administrando el veneno a pequeñas dosis. Pero veneno al fin de cuentas y de cuyo resultado y efectos todo el que piense un momento puede tener una visión clarividente y real de hacía donde vamos, de hacia dónde nos lleva.
A uno le gustaría saber qué porcentaje del personal se cree eso de que no estamos rescatados. Que los famosos 100.000 millones de euros –insisto de euros que no de pelas- es un préstamo que se le hace a la banca y que la banca tendrá que pagar. Que eso no es un rescate. Que si patatín que si patatán. A este paso a poco que dure la crisis, y mira que prevemos tristemente que va a durar bastante, estos políticos de pacotilla nos ponen patas arriba el diccionario de la Real Academia hasta al punto que nos resultará entenderles más difícil que descifrar una persona de edad un sms escrito todo utilizando una cuarta parte de las letras que deben componer las palabras. Que manía de no llamar a las cosas por su nombre. Si el Gobierno ha pedido esa millonada evidentemente es porque no tiene capacidad para aportar esa ingente cantidad de dinero que necesitan algunos bancos de la que dicen es la cuarta economía de la eurozona para sanear sus balances. En castellano que no hay pasta, coño, y que la que había nadie sabe dónde está. Esta lluvia de miles de millones tendrá reflejo en el día a día de los ciudadanos de este país se empeñen en ocultarlo quien se empeñe. Tiene narices, como decía el otro día un amigo mío, de esos que no se anda por las ramas y que habitualmente llama al pan pan y al vino vino. Aquí si se te ocurre no pagarle al banco un par de plazos de la hipoteca van a por ti sin ningún tipo de miramiento y si ellos, es decir, esos mismos bancos que han ido a por ti necesitan dinero, recurren al dinero de todos los ciudadanos y se lo damos con todo tipo de justificaciones por parte de quienes nos gobiernan.
Que sí, que nos digan lo que nos digan, esos millones van a elevar la presión sobre los objetivos presupuestarios, o lo que es lo mismo sobre objetivos del maldito déficit y de la deuda. Las ayudas conllevaran nuevas medidas de consolidación fiscal sí o sí y esto para que todo el mundo lo entendamos es más recortes de gastos y nuevas subidas de impuestos. El otro día el ministro Luis De Guindos decía, y cito textualmente, “no habrá nuevos condicionamientos macroeconómicos ni nuevos condicionamientos fiscales” pero los intereses del crédito concedido por Bruselas los tendrá que garantizar el Gobierno y eso elevará el déficit público y por tanto llevará consigo nuevos ajustes. ¿O no? Ya son constantes las voces que desde distintos estamentos y por supuesto desde Bruselas están aconsejando e incluso imponiendo la subida de la recaudación del impuesto sobre el consumo IVA. Seguramente que una vez que se entregue la ayuda Bruselas endurecerá las condiciones, por mucho que el Sr. Rajoy se empeñe en vender su gestión en este asunto como un éxito. Entre estas condiciones estarán retrasar la edad de jubilación, eliminar la reducción por compra de vivienda, etc. etc.
Entre paréntesis, basta asomarse un poco allende los pirineos, parlotear con el personal y estar un poco atento a los medios de comunicación de esos países para calibrar el concepto que tienen del Sr. Rajoy, de su Gobierno, etc. e incluso, si me apuran, del Reyno de España, como acostumbra a llamar el presidente a esta piel de toro.
Pues eso, que como se suele decir “a morir al palo”. Pero la historia es que siempre manejan el palo los mismos y también son los mismos los apaleados. Son no poco los economistas que a los 100.000 millones “de nada” lo llaman ya por su verdadero nombre y, lo que es peor auguran que este rescate y los que vengan lo pagaran los ciudadanos indicando cómo el paro, los funcionarios y las pensiones están ya en el punto de mira del cazador subyugado y subyugador.
Hay pues una clara ausencia de información sobre lo qué se hace, en los cómos se hace, en las condiciones en que nos prestan el dinero y en explicar al ciudadano qué le va a suponer esas actuaciones que llevan a cabo sus gobiernos, sus comunidades o sus ayuntamientos.
Están empeñados, sino todos, la mayoría de quienes a un nivel u otro ostentan el poder, políticos de pacotilla y engañadores que digo yo, en que sigamos encerrados en el cuarto obscuro sin saber siquiera ni qué hora es. Tienen miedo a que el ciudadano sepa las cosas y ponen en ocultar todo lo que sea posible el mismo empeño los gerifaltes del Gobierno que están jugando con el devenir de esta sociedad para varias décadas que el alcalde o alcaldesa del pueblo que se niega sistemáticamente a proporcionar información al personal si este no se la demanda cumpliendo todas las legalidades habidas y por haber y repetidamente.
¿Donde encuadramos sino la patada dada por la Sra. Barcina a la banqueta vía teléfono con la consiguiente caída de sus ocupantes?. Seguro que este será un tema al que recurriremos próximamente. Pero no, no será este bloguero quien defienda como bueno el hacer del PSN en estos meses en que han compartido gobierno con UPN. Es más, hace meses presagiábamos un corto recorrido a este gobierno de UPN y PSN pues a veces se empeñan en realizar la cuadratura del círculo. Aquí amigos y en Madrid enemigos no puede ser si se es medianamente serio, consecuente y no se está dispuesto a ceder parte de su patrimonio político si es que se tiene. Incluso lo dejamos escrito en una entrada en este blog fechando su final aproximadamente para el mes de abril. Nos hemos equivocado por algunas semanas. Pero lo que nos parece patético es que se haya instalado fehacientemente una gran duda y sospecha sobre las cuentas de esta comunidad entre la ciudadanía y a consecuencia de ello vivamos en vilo pues en función del agujero que exista, de nuevo vamos a ser más o menos apaleados, más o menos recortados, más o menos subyugados. Esto también es cuarto oscuro.
Sí, así titulaba y así quiero terminar por hoy. Estamos rescatados, subyugados y con la democracia encerrada en el cuarto obscuro. Una verdadera pena y me temo que o nosotros nos esforzamos por salir de este cuarto obscuro o ellos, léase, políticos, politicuchos del tres al cuarto, poco piensan hacer por abrirnos la puerta que nos dé acceso a la luz de la democracia.
José Luis Ochoa.
