viernes, 11 de enero de 2013

PROSTITUCION POLITICA Y PROSTITUCION DEMOCRATICA


PROSTITUCION POLITICA Y PROSTITUCION DEMOCRATICA
Dice el diccionario ilustrado de real academia española que prostitución es la acción y efecto de prostituir. A su vez prostituir por una parte es exponer públicamente toda clase de torpezas y por otra es corromper, deshonrar algo por abusar de ello por propio interés. Pues bien esto es lo que estamos observando semana tras semana, día tras día, que está ocurriendo en nuestro entorno respecto a la política y a la democracia. Que si no somos capaces de recuperar el quehacer democrático como base donde anclar nuestro devenir diario, nuestra convivencia diaria, caminamos hacia el abismo, es algo que tiempo ha tenemos asumido. Es posible que de forma similar a lo del huevo y la gallina, uno verdaderamente tampoco sería capaz de argumentar si produce  antes la corrupción, la prostitución de la política ó la de la democracia. Tampoco pensamos que en este momento sea lo más importante, ni mucho menos, conseguir establecer la prioridad correctamente. Lo que es importante y tremendamente preocupante es que existen, que se dan tanto la una como la otra y que en muchas ocasiones caminan de la mano. Por otra parte es igualmente preocupante que aquí parece que no hay nadie que sea capaz de detener este desmadre político y este abandono constante del comportamiento democrático por parte de quienes nos gobiernan.

Que aquí las cosas últimamente no funcionan es más que evidente. Madrid Arena con una alcaldesa que, diga lo que diga no ha sido elegida por el pueblo para ser alcaldesa, por mucho que legalmente sea así y que afirma con toda tranquilidad que en ningún momento ha pensado en dimitir. Estamos en este país con un banco de España que abandonó sus responsabilidades de control de los bancos y ante los desaguisados habidos miró hacia otro lado con total impunidad hasta el momento para los responsables. En este país llamado España hay cientos de cargos políticos imputados a los cuales la propia constitución y demás leyes los amparan y protegen bajo el manto de la presunción de inocencia con una justicia que se eterniza a la hora de resolver la mayoría de los casos. Y lo que es más grave, no es extraño ver la presencia de imputados e incluso condenados  en las listas electorales porque  esto tampoco provoca un castigo electoral la mayoría de las veces por parte de la ciudadanía.
Aquí es necesario y urgente iniciativas regenerativas de la democracia que vengan desde abajo. Tenemos claro que con unos partidos y unos sindicatos mirando para otro lado no será posible regenerar el comportamiento democrático en este país. Necesitamos con urgencia un renacimiento cultural y moral para profundizar en la democracia. Necesitamos que la democracia conforme cualquier tipo de actividad y en este momento pensamos que esto solamente se va a conseguir si se empuja desde abajo. Si no es desde abajo no se va a conseguir. Sólo con la combinación de política con propósitos radicales y movilización social puede lograrse todo esto.
¿Cómo vamos a confiar que sean quienes nos gobiernan los artífices de esta regeneración democrática imprescindible si ni son demócratas ni creen en la democracia y a lo sumo lo que hacen es utilizar la puerta falsa de la democracia, utilizando el salvoconducto que les proporcionan las leyes que de democráticas tienen bastante poco, para hacerse con el poder y gobernar con minorías como si tuviesen todo el apoyo popular del mundo?

Dice el señor Duran jefe de Unió y por tanto responsable del gobierno de Cataluña en estos momentos que a pesar de que su partido ha estado implicado en el tema Pellerols y así lo han reconocido con un acuerdo escandaloso con jueces y fiscales de por medio, que no tiene intención de dimitir. Grave, gravísimo, pero no es menos grave que quienes les apoyan en el gobierno –uno ya no sabe si de izquierdas o de derechas- como son los chicos de ERC se limiten a decir que el Sr. Duran debería dimitir. También ellos están prostituidos pues entendemos que lo correcto sería decir: “nosotros con esos señores no queremos saber nada mientras por lo menos no depuren responsabilidades políticas y penales si las hubiere tamizadas por el cedazo de la democracia y por tanto aquí se quedan”. Por eso decíamos al principio que prostituir es corromper algo por abusar de ello por propio interés y en este caso corrompen el juego democrático por seguir manteniendo sus cuotas de poder tanto unos como otros a cualquier precio.

Igualmente prostituyen la política y la democracia quienes gobernando en minoría, caso de esta tierra nuestra, desoyen los acuerdos tomados por mayoría en el parlamento y posponen su aplicación prácticamente sine die. Prostituyen así mismo la democracia y la política quienes se oponen a facilitar que se clarifique qué ha ocurrido con la CAN y de paso pretenden echar tierra sobre el asunto diciendo que son partidarios de que se publicite el patrimonio de todos y cada uno de los parlamentarios. A otro perro con ese hueso. La publicidad del patrimonio de cualquier personaje político dedicado a la administración del patrimonio de los ciudadanos debería ser público cuando entra a ocupar un puesto, durante el desempeño de su quehacer político y cuando abandona ese menester político. Pero, ojo, también entendemos que prostituyen la política e incluso la democracia quienes desde la oposición son incapaces de, dadas las circunstancias, impedir con una moción de censura estos comportamientos y siguen permitiendo con sus desacuerdos constantes, comportamientos que en ningún caso cuentan con el apoyo de la mayoría de los ciudadanos. Claro, mientras tanto la Cospedal, que de momento pensamos no es secretaria general de UPN, animando a la Sra. Barcina a agotar la legislatura como sea, aunque sea contra viento y marea.
¿Por qué coño tienen que venir siempre los de fuera a decirnos qué es lo que tenemos que hacer ya sea en Madrid, en Navarra o en mi pueblo? Tiene narices la cosa.

Claro y no digamos nada de prostitución democrática y política por parte de quienes habiendo sido elegidos por los ciudadanos ni se presentan en los foros donde se decide el quehacer municipal que afecta a todos los vecinos. Estos, como diría un amigo mío, “están fuera de catalogo”.

Últimamente dicen que en este país ya se ha rebasado la cifra de seis millones de parados y que por lo visto todavía no se ha tocado fondo. Este es posiblemente el problema de más calado por su repercusión inmediata y perdurable en todo el entramado social. Pues bien, los políticos de turno que tanta prisa se dieron en cambiar la constitución entrando por la puerta de atrás porque así lo demandaba la Merkel para incluir en ella el tema del déficit, ni se inmutan. Parece que estuviesen esperando a que aparezca alguna especie de rey mago para que nos solucione el asunto del paro. Claro no se han enterado que los Reyes Mayos ya pasaron hace unos días y del otro rey mejor ni hablar con sus entrevistas enlatadas, con su “amiga” en la cresta de la ola de la corrupción de su yerno, etc. La situación del paro es tan importante, tan dramática y de consecuencias tan tremendas que entendemos es ya una emergencia nacional y ante este asunto deberían haberse puesto en marcha todas las medidas posibles ya hace tiempo. Pero no, y por tanto hasta límites tan insospechados ha llegado la prostitución de la política y de muchos de nuestros políticos.
Aquí parece que ya nadie se escandaliza por nada. Es igual que el Rato de turno haya sido despedido del FMI donde no supo o no quiso ver la crisis que se avecinaba, que como “premio” se le haya permitido hacer lo que ha hecho con Bankia y que estando “imputado” se le nombre asesor o lo que sea de Telefónica, la compañía que nos cruje constantemente a la mayoría de los españolitos de a pie.

Uno tiene la sensación que comienza a perseguirnos cuan perro sabueso la bancarrota política y moral. Y para detener esto uno comienza a pensar que es imprescindible y urgente que las personas con posiciones ideológicas dispares y con trayectorias vitales distintas nos encontremos en un mismo lugar y abracemos un mismo objetivo: defender la democracia como única solución a la mayoría de nuestros males. De lo contrario estamos condenados a soportar la prostitución de la política y por ende la prostitución de la democracia, con consecuencias imprevisibles.
Mientras tanto, como demócrata, que no milita en ningún partido político cada día estoy más convencido de que la indiferencia da el poder a los mediocres.

José Luis Ochoa